- Redes de apoyo debilitadas y prioridades consumistas agravan el aislamiento de esta comunidad durante los últimos días del año.
- Instituciones refuerzan personal y activan protocolos ante aumento de casos de abandono en época festiva, señala universidad.
- UNED hace un llamado urgente a la sensibilidad y trato digno hacia la población adulta mayor todo el año.
- Familias y comunidades pueden prevenir la negligencia con organización, inclusión y redes solidarias.
San José. La Universidad Estatal a Distancia (UNED) advirtió que durante las fiestas de fin y principio de año incrementa el abandono, negligencia y aislamiento de personas adultas mayores, así lo señaló el Programa Persona Adulta Mayor de la Vicerrectoría de Extensión y Vinculación Territorial (VEXVT).
La facilitadora del Programa, Yeimy Gonzáles Navarro, explicó que este fenómeno responde a múltiples factores sociales, económicos y familiares, “en estas fechas se evidencia un debilitamiento de las redes de apoyo comunitarias y familiares”, dijo.
Agregó que las dinámicas sociales han cambiado, “las prioridades se centran en el consumo y las actividades recreativas, dejando menos espacio para compartir con quienes requieren compañía y cuidados especiales”, subrayó González.
Por su parte, la coordinadora del Programa, Melissa Sánchez Salas, señaló que la presión económica también influye como lo son los gastos asociados a la época —regalos, viajes, celebraciones— “hacen que algunas familias prioricen otros aspectos y descuiden necesidades básicas de las personas mayores, como medicinas, transporte y acompañamiento”, manifestó.
Sánchez detalló que las formas de negligencia, maltrato y exclusión hacia las personas mayores en esta época son altas y presentan una alerta nacional que evidencia una lamentable realidad de abandono hacia la población adulta mayor.
“Por ello, desde el Programa Persona Adulta Mayor hacemos un llamado a la sensibilidad, trato humano, digno y respetuoso para quienes requieren de nuestro apoyo y compañía, no solo en época navideña sino también durante todo el año”, indicó Melissa Sánchez.
Se preparan. Las instituciones públicas, hogares de larga estancia y organizaciones comunitarias refuerzan sus estrategias en estas fechas mediante:
- Incremento de personal especializado en enfermería, trabajo social y psicología.
- Evaluaciones de riesgo para determinar si el abandono es temporal o permanente y activar protocolos judiciales o policiales cuando sea necesario.
- Guardias ampliadas en fines de semana y feriados, habilitación de camas adicionales y espacios provisionales.
- Coordinación interinstitucional con municipalidades, policía, hospitales, Ebais y CONAPAM para definir protocolos de atención, traslados y seguimiento.
- Campañas informativas y líneas telefónicas 24/7 para denuncias y sensibilización sobre derechos de las personas mayores.
- Actividades navideñas inclusivas para fortalecer el sentido de pertenencia y acompañamiento.
A nivel comunitario, asociaciones y comités locales realizan visitas domiciliarias, entregan alimentos y reportan situaciones de riesgo, promoviendo redes de apoyo vecinal.
¿Cómo prevenir el abandono?
El Programa recomienda:
- Planificación familiar anticipada: definir turnos de cuidado, adaptar celebraciones y garantizar medicinas y citas médicas.
- Fortalecer redes comunitarias: crear grupos de apoyo, organizar visitas y actividades inclusivas.
- Promover educación y sensibilización: talleres sobre envejecimiento saludable, derechos y prevención de violencia.
- Cambiar la narrativa social: pasar de ver a las personas mayores como “carga” a reconocer su valor, historia y aporte.
Construir cultura. Sánchez señaló que una cultura de acompañamiento hacia las personas mayores se construye modificando el discurso y las creencias que las ven como una “carga” o “estorbo”, para reconocerlas como seres con memoria, historia, fuerza y amor.
“Es tarea de todos promover mensajes positivos en redes sociales, escuelas, trabajos y reuniones, fomentando el respeto y trato digno”, dijo Sánchez.
Finalmente, Yeimy Guzmán, coincidió en que esta cultura debe empezar desde la niñez, inculcando empatía y responsabilidad hacia la población mayor, “por ello se recomienda crear espacios en escuelas y colegios para actividades intergeneracionales y diálogos que presenten la vejez como una etapa positiva”.
“Padres, madres y educadores deben transmitir con el ejemplo la importancia emocional de las personas mayores en la familia, además, es fundamental rescatar valores, costumbres y tradiciones mediante recursos artísticos y literarios —cuentos, historietas, recetarios, obras de teatro— que honren el legado de las personas mayores y fortalezcan su identidad y la de sus familias”, concluyó Guzmán.
[/responsivevoice]


